Ser Prójimo nació de un sueño compartido, un llamado al servicio y al amor al prójimo que comenzó en 2014, cuando un grupo de jóvenes participó en un encuentro inspirador en Canadá. Ese viaje no solo nos permitió vivir experiencias transformadoras, sino que nos mostró el poder del trabajo en equipo y el impacto que se puede lograr cuando las personas se unen por un propósito común.

A nuestro regreso, con los corazones llenos de ideas y motivaciones, nos reunimos con otras personas que compartían el mismo sentir: el deseo profundo de ayudar y de ser instrumentos de cambio en nuestra comunidad. Esas reuniones marcaron el inicio de algo mucho más grande. Juntos, comenzamos a planificar y darle forma al proyecto que, años después, se convertiría en Ser Prójimo , un espacio donde los dones y talentos de cada persona se transforman en acciones concretas de ayuda.

Desde entonces, nuestra historia ha sido un viaje lleno de aprendizaje, crecimiento y transformación. Lo que comenzó como una idea en pequeñas reuniones fue tomando forma hasta convertirse en una asociación civil independiente. En Ser Prójimo nos guiamos por una misión clara: ser un espacio que inspire a jóvenes y adultos a involucrarse en el servicio al prójimo, promoviendo valores como la solidaridad, la empatía y el compromiso.

A lo largo de los años, hemos llevado adelante proyectos que reflejan nuestra esencia. Desde campañas de recolección de ropa y alimentos para el invierno, hasta la entrega de útiles escolares que permiten que cientos niños de comiencen sus clases con ilusión. También hemos respondido ante emergencias, como inundaciones o situaciones de crisis, demostrando que, unidos, podemos enfrentar cualquier desafío.

Un momento clave en nuestra historia fue la creación de la Casa Ser Prójimo , un lugar que simboliza el corazón de nuestra organización. Este espacio, que necesitó ser restaurado y renovado gracias al esfuerzo conjunto de socios y colaboradores, se ha convertido en el epicentro de nuestras actividades. Aquí se planifican proyectos, se desarrollan ideas y se tejen lazos de solidaridad. La casa no solo es un lugar físico, sino un símbolo de lo que podemos lograr cuando trabajamos juntos.

Cada persona que se ha sumado a Ser Prójimo ha aportado su granito de arena, su energía y sus talentos únicos. Desde los facilitadores que guían proyectos con entusiasmo y liderazgo, hasta los colaboradores que ofrecen su tiempo y disposición para tareas específicas, cada uno ha sido fundamental para construir esta comunidad. A través de sus hechos y cualidades, han hecho posible que Ser Prójimo siga creciendo.

Hoy, seguimos avanzando con la misma pasión que nos unió en 2014. Ser Prójimo es un reflejo de lo que podemos lograr cuando nos unimos con un propósito mayor. Continuamos promoviendo nuestra misión y visión, desarrollando nuevos proyectos y soñando con un futuro en el que podamos llegar aún más lejos.

Pero nuestra historia no estaría completa sin vos. Si sentís el deseo de ayudar, de compartir tu amor y tus talentos, y de ser parte de algo más grande, Ser Prójimo te espera con los brazos abiertos. Súmate como socio, colaborador o facilitador. Ayudanos a seguir transformando vidas y construyendo una red cada vez más grande de corazones solidarios.

Porque juntos podemos lograr mucho más. ¡El futuro de Ser Prójimo está en tus manos, y cada paso que damos!

Hoy es un buen día para ser parte de esta historia. ¿Te sumas?